Aprovecha el acceso a la terraza para desayunar al aire libre y disfrutar de buenas vistas. Es un detalle que realza la experiencia.

exploraciones fáciles y encantadoras en el corazón de génova

Durante mi estancia, disfruté del excelente desayuno en un ambiente sereno y moderno, lo que fue un gran comienzo para mis exploraciones diarias en el centro histórico, ya que todo el barrio tiene su propio encanto único y está a pocos pasos de atracciones como el Acuario y el Palazzo Bianco.

Tuvimos una experiencia genial con amigos. Este hotel es un buen punto de partida para visitar el Acuario y la Catedral de San Lorenzo. El barrio tiene su encanto aunque puede parecer un poco intimidante al principio. Recuerden entrar por la Piazza Campetto para hacerlo más fácil. Los anfitriones son muy amables y el servicio al cliente es personalizado.

Aunque el lugar es bonito, nuestra habitación tenía un aire acondicionado muy ruidoso, lo que afectó nuestro descanso. Intentamos comunicarnos para solucionarlo, pero no obtuvimos respuesta. Esto fue un poco frustrante.

hospitalidad y confort en un lugar encantador

La habitación era amplia y tenía un diseño encantador, lo que hizo que nuestra estancia fuera muy placentera. La limpieza del lugar fue excepcional y se notaba en cada rincón. El acceso a la terraza para desayunar al aire libre nos dejó disfrutar de unas vistas maravillosas de la iglesia cercana.

Sin embargo, el ascensor era pequeño y a veces teníamos que esperar un poco para usarlo.

acceso encantador por callejuelas, diseño arquitectónico único, ubicación en distrito histórico

Dificultad para encontrar el hotel debido a la falta de señales claras!!! La zona puede ser inquietante por la noche!!! Además, el ruido de la calle podría mejorar con un mejor aislamiento!!! Un ascensor pequeño y antiguo resulta incómodo!!!

Me gustó mucho el acceso a la terraza para desayunar al aire libre, y las vistas eran increíbles. La habitación era espaciosa y limpia, con techos altos que le daban un aire luminoso. La decoración interior mezcla lo moderno con lo clásico, dándole un encanto especial a todo el lugar. ☕

Un lugar acogedor en pleno corazón de Génova

Nos encantó la mezcla de moderno y clásico en las habitaciones, que eran amplias y bien decoradas, además de contar con un baño perfecto. La atención del personal fue excepcional, brindando ayuda en todo momento y ofreciendo un desayuno increíble con un delicioso cappuccino. Sin embargo, la exclusividad del barrio puede resultar abrumadora para algunos.

Disfruté de un excelente desayuno con vistas agradables en la terraza. La habitación era cómoda y estaba muy limpia, aunque el aire acondicionado hacía un poco de ruido. La ubicación es central, lo que facilita recorrer la ciudad, pero puede ser ruidosa por la noche, lo que podría dificultar el descanso.

Habitación cómoda y limpia, pero el aire acondicionado hacía ruido.

La habitación era muy cómoda y bonita, con esos techos altos que le daban una sensación de amplitud increíble. El baño también era amplio y todo estaba súper limpio. La cama era tan cómoda que dormimos genial. Además, justo enfrente hay una iglesia preciosa que le daba un toque especial a la vista. Definitivamente, me encantó el espacio.

La ubicación es inmejorable, en pleno corazón del centro histórico de Génova, aunque el barrio puede parecer intimidante al principio por sus calles estrechas. Las habitaciones son modernas y tienen un diseño muy atractivo, pero el ascensor es pequeño y a veces había que esperar.

Disfruté de desayunar en la terraza con vistas agradables. Las habitaciones tienen techos altos y están bien equipadas. El lugar tiene un ambiente que respira historia por los pasillos decorados con frescos antiguos. La atención del personal fue acertada, brindando apoyo en todo momento. La ubicación permite explorar la ciudad sin complicaciones, aunque a veces el acceso es algo incómodo.

El acceso al hotel puede ser tedioso con maletas y se requiere caminar por calles estrechas. La zona es ruidosa por la noche, lo que dificulta el descanso.

El interior del hotel tiene un diseño moderno y minimalista, lo que crea un ambiente acogedor. Las habitaciones son luminosas y están muy limpias, además de ofrecer vistas agradables de la plaza y las iglesias cercanas.

La zona puede ser ruidosa por la noche, lo que dificulta conciliación del sueño, ya que no hay persianas para bloquear la luz exterior. Además, el acceso al hotel desde el parking puede resultar incómodo con maletas, dado que hay que recorrer un camino tedioso hasta llegar.